Hoy es el bicentenario del nacimiento de Robert Bunsen, químico alemán que investigó la interacción entre la materia y la energía radiada. Descubrió el cesio (1860) y el rubidio (1861) conjuntamente con Gustav Kirchhoff. Bunsen desarrolló varios métodos de análisis de gases, fue pionero de la fotoquímica, y de los primeros en trabajar en el campo de la química organoarsénica (compuestos que contienen un enlace químico entre el arsénico y el carbono).
Algo curioso sobre él, es que descubrió que el óxido de hierro hidratado era un antídoto para el envenenamiento con arsénico. Esto le resultó un gran logro personal y muy significante para él ya que una vez estuvo cerca de morir envenenado por arsénico cuando trabajaba con cacodyl, un aceite de arsenio. Además, perdió la vista en un ojo en una explosión de laboratorio. Después de estos percances se tomó con más calma la
Con su asistente de laboratorio, Peter Desaga, desarrolló el mechero Bunsen, una mejora en los quemadores de laboratorio entonces en uso. El Premio de Bunsen-Kirchhoff para la espectroscopia fue creado en honor a los dos científicos.
Los mecheros Bunsen los utilizamos cada día en el laboratorio de química (para el calentamiento de las muestras: destilación, disoluciones,...) y microbiología (flameo de asas de siembra, creación de un área de 20cm de esterilidad,...)